viernes, 16 de marzo de 2012

NADA NADA DE SUERTE

   Esta semana estuve charlando con un persona en una conversación de ésas, triviales, en la que se habla de todo en general y nada en particular. En el transcurso de ésta me soltó... Yo no tengo NADA de Nada de suerte. Me quedé reflexionando un momento y después le pregunté:

 -Dónde vives?
-En Badalona, por qué?
-Bueno, eso ya es una suerte. Seguramente, el haber nacido en según qué parte del planeta supone un hándicap.
-Tienes hijos? volví a preguntar.
- Sí, tengo uno. Es el motor de mi vida. Respondió.
-Ajá. Pues creo que tienes suerte en tener a alguien a quien seguramente quieres más que a ti misma.
-Tienes grandes problemas, entonces?
-Sí, durante mucho tiempo he tenido una relación que ha hipotecado mi ser, mi esencia como persona.
-Y esa persona sigue produciendo esos efectos sobre ti todavía?
-No, ya no. Pero todavía no estoy desligada totalmente de las redes que produjeron eso.
- Pues creo que es una gran suerte el haber decidido al fina poner fin a tu problema, ahora el problema no está en ti principalmente, sino en otra persona. vayas por donde vayas en la vida, te vas a encontrar con problemas. Pero se ha de saber distinguir si el problema está en nosotros o fuera de nosotros.
Cuando alguien decide solucionar un problema, éste deja de ser interno para pasar a ser externo a nosotros, no importa cuando se acabe de solucionar del todo.
La verdad, algo algo de suerte, creo que si tienes.
_ ... Gracias.

Al cabo de un rato, me quedé dándole vueltas al tema de la suerte y la nada.

La suerte existe, por supuesto, y también la nada. Aunque lo único que es nada, es la NADA. Es decir, Nosotros ya no podemos ser nada... NADA  de NADA. Por consiguiente, la suerte nos viene dada desde que existimos, nos viene de serie, vaya.
Hace un rato iba andando por la calle y me ha dado la sensación de que lo miraba todo sin ser yo. Como si estuviera viendo una película en la que todo a mi alrededor formara parte de ella, incluso yo mismo. He pensado que todo eso era SUERTE en estado puro.